El toyota GR Supra es el mítico deportivo de la marca nipona. Se trata de uno de los coches más populares y más queridos en el mundo del motor gracias al legado que dejó la cuarta generación de este coupé biplaza. Esta nueva generación, la quinta, ha hecho que todos los amantes de la marca y aficionados de los coches deportivos vuelvan a tener fe en un mundo en el que cada vez todo está más electrificado. Por suerte, Toyota está volviendo a ser la que era, y con el lanzamiento del GR Supra y del GR Yaris nos deleitan con unos modelos magníficos puestos a punto por la división Gazoo Racing, es por ello que estos dos modelos añaden a su nombre las siglas GR.

Esta quinta generación se denomina como GR Supra A90, y sus medidas son: 4’38M de largo, 1’85M de ancho, 1’29M de alto, y su distancia entre ejes es de 2’47M. Se ofrecen dos versiones de este deportivo: Pure y Performance. La primera equipa un motor gasolina de 4 cilindros y 2 litros de cubicaje, con turbo y 258cv, mientras que la segunda, la cual es la que estamos probando, monta un motor de 6 cilindros en línea, 3.000 centímetros cúbicos de cilindrada y turbo, que rinde 340cv. La caja de cambios será en ambos motores de tipo convertidor de par y 8 relaciones, denominada ZF. Y la tracción también será, en ambos casos, trasera. Perdón, propulsión.

Como hemos comentado antes, la división Gazoo Racing ha sido la encargada de desarrollar este GR Supra, en conjunto con BMW, ya que este modelo japonés comparte plataforma y motor con el Z4, el modelo descapotable alemán. El reparto de pesos es de 50-50 en ambos ejes, que junto a un chasis muy rígido y a un motor potente que lleva toda su potencia al eje trasero, convierten a este Supra en toda una máquina muy rápida que enamorará a todo el que lo pruebe.

En cuanto a su estética, las líneas dinámicas y suaves son la característica del GR Supra, que gana agresividad en sus paragolpes delantero y trasero. En su frontal lo que más llama la atención es su enorme capó, larguísimo, seguido de unos faros afilados y unas entradas de aire en su zona inferior, junto con otras que son falsas y que cobran sentido en la versión de competición. El lateral destaca por unos marcados pasos de rueda que harán que las plazas de garaje se queden muy estrechas, con más entradas de aire falsas en la puerta, y unas taloneras negras en la zona inferior.

Las llantas, de 19 pulgadas, son forjadas, y montan neumáticos Michelin Pilot Super Sport. En el eje delantero la medida es de 255/35, mientras que en el trasero el ancho aumenta hasta 255. La caída del techo que marca esa silueta súper coupé termina en una cola de pato que hace la función de alerón, que nos guía hasta la fabulosa parte trasera: faros LED que marcan el enorme ancho, logo clásico de Supra junto con el de GR y un enorme difusor negro que integra dos salidas de escape y una luz de antiniebla y marcha atrás en el centro, al estilo coche de rally. Con permiso de Toyota, creo que podemos confirmar que este Supra es un verdadero “culo gordo”.

En el interior se notan los aires alemanes de BMW en su elaboración. Los materiales empleados son muy buenos, con plásticos blandos y algún detalle que simula fibra de carbono en la consola central. El volante no tiene un aspecto extremadamente deportivo, y aunque su diametro y tacto son excelentes, se echa en falta algún emblema deportivo en él, como el logo de GR. El cuadro de instrumentos es de 8’8 pulgadas ocn un cuentarrevoluciones en el centro, muy deportivo. El sistema multimedia también es de 8’8 pulgadas, y su interfaz es muy completa y fluida, con navegación, conectividad plena y todo tipo de reglajes del vehículo, incluso deportivos, además de incluir la cámara de visión trasera y sensores.

Los asientos son de estética deportiva, con un grado altísimo de comodidad y confort, y disponen de reglajes eléctricos y calefacción en 3 intensidades. Detras de los asientos está directamente el maletero, donde podremos ver el subwoofer del sistema de audio.

El maletero es de apertura manual y dentro encontramos 290L de capacidad, suficientes para las dos personas que viajen en este Supra. Caben dos maletas y la carga cotidiana, por lo que está capacitado para un uso diario y también para hacer alguna escapada en pareja.

Y llega la hora de ponerse a los mandos del GR Supra A90, versión Performance. ¿Qué quiere decir esto? pues que es la versión más potente, con motor 3.0L 6 cilindros en línea, turbocompresor de doble entrada y 340cv. Se trata del propulsor que monta BMW en varios de sus modelos deportivos, también en el Z4. Es un motor que. si bien es cierto, difiere en más de 20 años del motor del Supra MK4, tiene similitudes en cuanto a sus características, por lo que consideramos que es un gran acierto por parte de la colaboración entre BMW y Toyota el incorporar este motor al modelo nipón.

Es muy potente, desde las 1.600 RPM dispondremos de 500nm de par, y la contundencia con la que empuja se nota hasta la zona roja del cuentarrevoluciones, por lo que es un motor muy lleno en todo su régimen. Consigue el 0-100 en tan solo 4’3 segundos. El cambio automático ZF de convertidor de par y 8 relaciones actúa de maravilla en todo tipo de conducción, ya que contribuye a una conducción relajada en su modo normal, circulando a muy bajas vueltas, mientras que en modo Sport estirará las marchas para sacar todo el jugo del motor, aunque recomendamos en este modo Sport cambiar de manera manual a través de las levas.

Los consumos obtenidos en la prueba son de 10-11L en combinado, 8’6L en carretera y 14 litros en ciudad, mientras que en modo Sport podremos llegar a 17L, un consumo más que correcto, ya que estamos ante un deportivo puro, potente y que transmite muchas sensaciones. El chasis es de lo mejor que hemos probado, y Toyota saca pecho en este aspecto, ya que la rigidez de este Supra es mayor que la de un Lexus LFA. Las suspensiones son fabulosas, ya que no son para nada incomodas para un uso urbano, mientras que en modo Sport se endurecerán y conseguirán un aplomo y una estabilidad en curva envidiables.

Los frenos actúan de manera sobresaliente sobre los 1570kg que pesa el conjunto. El equipo de frenos Brembo integra discos de 348mm y pinzas de 4 pistones en el eje delantero, y discos de 345mm y pinzas de un único pistón en el eje trasero. El puesto de conducción es muy bajo, típico en un deportivo coupé, y la visibilidad es escasa, aunque es fácil acostumbrarse a este tipo de conducción. En cuanto a ayudas a la conducción, dispone de corrección de volante, aviso de ángulo muerto, aviso de precolisión, control crucero adaptativo, cámara trasera y sensores de parking…

El Toyota GR Supra equipa faros Bi-LED con un excelente alumbrado y tono, con luces largas automáticas. El precio para la versión Performance es de 69.900€. Aquí tienes la videoprueba que hemos realizado de este auténtico deportivo: