El Volkswagen ID5 es el último modelo eléctrico lanzado por la marca alemana. Como veis el diseño es prácticamente idéntico al ID4, de hecho comparten todo basándose en la plataforma MEB dedicada a los modelos 100% eléctricos del grupo Volkswagen. La diferencia más clara la encontramos en la parte trasera del coche, donde vemos una caída pronunciada del techo para darle ese aire Coupé. Además encontramos un spoiler que le da un aire más deportivo a este eléctrico. El coche se ve muy robusto en persona y eso es gracias a sus dimensiones (idénticas a las del ID4), a que tiene una línea de cintura bastante alta y a unas preciosas llantas de 20” que pueden llegar a ser de hasta 21”.

Se ofrece en varios acabados (Pro, Pro Performance y el GTX, que es el que vamos a probar hoy). Dependiendo del acabado tendremos potencias distintas, 174cv para el Pro, 204cv para el Pro Performance y 299cv y doble motor para el GTX, los demás son de propulsión trasera y la batería siempre es de 77Kwh de capacidad neta. Los dos primeros acabados homologan 514km de autonomía y el GTX 490km. Respecto a la carga de este ID5, podemos recargar hasta el 80% de la batería en corriente continua a una potencia de hasta 135KW en tan solo 36 minutos. De normal en un cargador como el que nos instaló nuestro patrocinador Puntos Recarga Madrid, el Velo Home-i, cargaremos en corriente alterna a 7,4kw, por lo que en unas 10 horas lo tendremos cargado por completo. También tenemos que destacar que se puede cargar en alterna hasta 11kw.

En su interior encontramos la misma filosofía que vimos en el ID4: un habitáculo simple, minimalista, con lo justo y necesario para la conducción. El cuadro de instrumentos es una pequeña pantalla acoplada a la columna del volante, que nos dará únicamente información acerca de la velocidad, autonomía, batería y la ayuda a la conducción del control crucero adaptativo. El sistema multimedia es de 12″ con conectividad plena inalámbrica, navegación, información del sistema eléctrico y carga, cámaras 360… su funcionamiento es correcto y es fácil de aprender a utilizar. Los asientos son deportivos y están diseñados en piel vuelta y símil de cuero. Ofrecen un buen agarre, son cómodos y sus reglajes eléctricos. El techo panorámico no es practicable, pero es enorme, ya que abarca prácticamente la totalidad del habitáculo.

Las plazas traseras destacan por su gran espacio (muy similar al del ID.4), fantásticas para que dos ocupantes vayan muy cómodos. La plaza central es más grande que lo que suele encontrarse en este segmento, y además no hay túnel de transmisión, por lo que irá bien en trayectos incluso de media distancia. Disponemos de regulación de la temperatura del aire acondicionado para estas plazas y salidas dos USB-C además de anclajes Isofix.

El maletero es de apertura eléctrica, y dentro encontramos 549L (6 litros más que eun ID.4) ampliables hasta 1.561L si abatimos las plazas traseras. La boca de carga está enrasada con el piso y las formas son regulares. Es un maletero muy aprovechable. Debajo encontramos un compartimento para guardar los cables de carga.

Una vez a los mandos, sorprende la agilidad con la que se mueve este ID.5 teniendo en mente los datos de peso y potencia. Es un coche grande, que sobrepasa las dos toneladas de peso, y con 299cv de potencia (en esta unidad de pruebas). Esta potencia es ideal y más que suficiente para este modelo, ya que es perfecta para trayectos urbanos, y correcta para autopista. Los consumos varían dependiendo de cuánto exijamos al motor o del tipo de trayecto que hagamos. En ciudad es donde menos gastaremos, rondando los 13-14kWh. En combinado estaremos entre 18 y 19kWh, y en autopista es donde más gastaremos, llegando a los 25kWh. La autonomía final será, realizando todo tipo de trayectos, de entre 450 y 470, realizando una conducción tranquila. En autopista, esta autonomía estará en torno a 300kms.

La dirección ofrece un tacto neutro, que se verá endurecido en el modo sport, y en su modo Eco y confort será más blanda para facilitar las maniobras urbanas. La suspensión realiza un gran trabajo filtrando las irregularidades del firme, aunque en el paso por curva se nota algo de balance: algo lógico debido al peso y envergadura del coche. Aun así, logra contener correctamente la carrocería y en ningún momento hemos notado sensación de inseguridad. Los frenos actúan perfectamente sobre el conjunto a pesar de que en el eje trasero contamos con frenos de tambor. El modo B retiene aún más, por lo que hará que los frenos no actúen solos. En cuanto a las ayudas a la conducción, dispone de aviso de ángulo muerto, control crucero adaptativo, aviso de cabio involuntario de carril con corrección del volante, park assist con cámaras 360, aviso de precolisión con frenada de emergencia… muy completo y con toda la seguridad disponible en un modelo de estas características.

Respecto al apartado lumínico, este ID5 cuenta con los faros IQ Light matriciales que alumbran de cine, y además al abrir el coche nos crea una luz de bienvenida preciosa, y en el interior vemos iluminación ambiente. Además este ID5 cuenta con las últimas ayudas a la conducción como el Travel Assist, capaz de corregirnos la dirección, unido a un control crucero adaptativo que lee las señales de tráfico y nos regula la velocidad automáticamente dependiendo de las circunstacias de la conducción.

Los precios para el ID5 parten de los 51.100€, mientras que nuestro GTX se va hasta los casi 58.000€ con las ofertas y promociones de la marca a la hora de realizar esta review.